Rosario Martínez falleció este jueves como consecuencia de un infarto, según informó Sport 890. El director técnico santalucense estaba viviendo en su tierra natal y, a sus 63 años, esperaba alguna oportunidad para volver a dirigir. Siempre recordado por esta región de Canelones, se lo vio muchas veces con su juego aguerrido de total entrega en las canchas de Sauce, Carrasco de Sauce, Santa Rosa entre otras tantas.
Frontal y polémico, siempre se definió como un entrenador pragmático que anteponía el resultado a cualquier otra cosa, dejando de lado la discusión por el estilo o las formas de juego. Su especialidad fue salvar equipos del descenso, realizando casi siempre buenas campañas.
Si bien trabajó en los dos grandes del fútbol uruguayo como asistente de Gregorio Pérez en Peñarol y de Roberto Fleitas en Nacional, se desempeñó mayormente en equipos de la zona media y baja de la tabla, empezando su carrera en 1990 en Wanderers de Santa Lucía.
Trabajó como ayudante técnico en El Tanque Sisley y Bella Vista, y en las formativas de Danubio. Como entrenador jefe dirigió a Atlético Florida, Salus FC primer equipo capitalino que dirigió, Olmedio de Ecuador, Xelajú de Guatemala, Progreso, Independiente Petrolero, Real Santa Cruz, Real Potosí y Guabirá de Bolivia, Universidad Católica de Ecuador, Fénix, Racing, Liverpool y por último Rampla Juniors, donde fue cesado en agosto de 2019.